El terremoto de Lorca puso de manifiesto la necesidad de prevención para este tipo de catástrofes. El Colegio Oficial de Geólogos creó un decálogo para minimizar el riesgo sísmico dirigido a las administraciones locales, autonómicas y centrales, decálogo que no obtuvo el éxito esperado. Por otro lado surgió otra iniciativa y esta fue la creación de una herramienta (APP) para la gestión online de los efectos de los desastres naturales (SGE 2.0).
SGE 2.0 es una plataforma web con una base de datos de la ciudad geoposicionada que nos ayuda antes, durante y después de una catástrofe. Ahorra tiempo y dinero. Puede gestionar y coordinar a los ciudadanos mediante simulacros para que estén preparados y aumentar su resiliencia.
La herramienta está formada por un software online en formato web de gestión de emergencias que permite organizar los recursos disponibles ante cualquier catástrofe y la colaboración simultánea de los diferentes actores que participan cuando se produce una catástrofe. Según pasa el tiempo tras un desastre, la aplicación va pidiendo más información y con los datos introducidos se sabe qué edificios hay que apuntalar, dónde hay que retirar elementos peligrosos, asegurar zonas, etc.
El sistema cuenta con tres fases de actuación: la primera es de preparación, en la que cada Ayuntamiento va insertando los datos; después se pasa a la intervención, cuando una vez sufrida la catástrofe hay que ver cuánta población está afectada. Durante la tercera fase, se trata de administrar los expedientes y las ayudas con los datos de las administraciones de fincas y de las comunidades de propietarios.
Una de las aplicaciones más interesantes es la más interactiva de todas y que permite a los habitantes que han sufrido una emergencia acceder al registro de datos. De esta forma, los ciudadanos pueden estar conectados con las autoridades por una red virtual paralela al WhatsApp.
SGE 2.0 está en continua evolución y ya ha cosechado el interés de distintos países.