ARTÍCULO PUBLICADO EN EL PERIÓDICO EL COMERCIO EL PASADO 29 DE ABRIL DEL 2013
EL «FRACKING» DE LA MENTALIDAD SOCIAL por Carlos Noval González
En los últimos meses se viene hablando del Fracking, su impacto ambiental, la propuesta de prohibición de esta técnica de explotación, etc… sin pensar en el potencial beneficio que la presencia de gas puede tener para nuestra región y sistema socio-económico. Y me resulta extraño, pues el desarrollo industrial de Asturias ha venido de la mano de sus recursos naturales, especialmente la presencia de carbón.
Por otro lado, no dejamos de oír que nuestro sistema energético es carísimo, amenazas de las empresas más importantes (ARCELOR; ALCOA y XSTRATA ZINC) de trasladarse a otro país por los incrementos en la tarifa eléctrica, etc.
Si realmente existen reservas explotables de gas que permitan reducir el coste energético, analícense técnica y objetivamente. Y no se prohíban tras posicionamientos subjetivos y demagógicos. Pues, correctamente gestionado, este recurso permitiría conseguir una serie de valiosos objetivos, como generar puestos de trabajo, que ante el cese de la actividad minera supondría una forma de evitar prejubilar a trabajadores cualificados. Ampliar y mejorar el sector industrial productivo, pues un menor coste energético permitiría a las empresas ser más competitivas sin deslocalizarse, ni tener que reducir plantilla y/o salarios. Desarrollar un tejido de I+D+i que evite la fuga de talentos y favorezca el desarrollo industrial. E invertir el superávit generado en beneficios sociales (Sanidad, Formación, Servicios Sociales, etc).
Analicemos el caso de Noruega, que a partir de los años 70 ha tenido un crecimiento económico espectacular tras descubrir reservas de hidrocarburos en el mar de Norte.
En aquellos años, las explotaciones en mar abierto (off-shore) eran un riesgo medioambiental enorme, pues la tecnología existente, o no era adecuada, o era muy limitada para este tipo de operaciones, que estaban iniciando su desarrollo. Y ¿Qué hicieron? ¿La prohibieron? No. Investigaron y desarrollaron la tecnología existente para mejorarla y adecuarla a sus necesidades para que les permitiera la extracción de un recurso natural propio sin afecciones medioambientales, convirtiéndose en una potencia en el sector.
Con esto no pretendo posicionarme a favor, ni en contra de la técnica de Fracking, sino animar, a la generación entre los 30 y 40 años, a la que pertenezco, a dar un golpe de timón, frenar la inercia que nos ha conducido a esta situación, y definir las bases de un sistema socio-económico propio que nos permita un desarrollo sostenible sin condicionantes exteriores, o que éstos sean mínimos, y donde los beneficios sociales sean el objetivo a conseguir.
Las revoluciones sociales, no se realizan solamente manifestándose o luchando en las calles, que también, sino con cambios de mentalidad creativa y motivando la participación de las personas. Y por supuesto, no prohibiendo lo que se desconoce, sino estudiándolo, conociéndolo y adaptándolo a nuestro beneficio.
Nos quejamos de la falta de oportunidades, que no se construye, y quizás sea el momento de cambiar esta mentalidad negativa, porque construir, no solo es hacer edificios e infraestructuras, que también, CONSTRUIR es elaborar una sociedad justa, equitativa, en la que los ciudadanos se comprometan y reciban su beneficio, en la que la mejor forma de ahorrar no sea suprimir un servicio o encarecerlo, sino optimizar su coste, en la que los políticos sean dirigentes que realicen su trabajo profesionalmente, y no personajes serviles y mediocres, que para colmo, deben contratar asesores para saber qué hacer.
Carlos Noval González
Geólogo Colegiado Nº 4011